Sintra lugar de cuento de hadas

A 31 kilómetros de Lisboa se encuentra Sintra, una pequeña ciudad portuguesa que parece salida de un cuento, por sus edificios llenos de color, su sierra, su zona boscosa, sus parques y la arquitectura romántica de sus castillos. Su casco antiguo ha sido declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.

Palacio Nacional da Pena

En Castellano es el Palacio de Peña porque está situado en lo alto de la zona montañosa de Sintra, con unas vistas panorámicas espectaculares, las mismas que en el siglo XIX enamoraron al rey Fernando II, mientras hacía una excursión con su esposa la reina María II. Esto lo motivó a encomendar al arquitecto Ludwig von Eschwege la construcción de un castillo espectacular, que compitiera con el castillo de Neuschwanstein de Bavaria.

De los castillos de Sintra, éste es el más llamativo por su mezcla de influencias arquitectónicas y sus colores, fruto del romanticismo de la época. En 1995 el palacio fue nombrado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.

Palacio Nacional de Sintra

Construido entre los siglos XV y XVI, muestra su influencia mudéjar con la decoración de azulejos. Entre lo más destacado están sus dos impresionantes chimeneas cónicas, la Sala de los Cisnes -donde se encuentran 27 frescos de cisnes con collares dorados en el techo-, la impactante Sala dos Brasoes -con las paredes repletas de azulejos y 72 escudos en el techo-, la Capilla Palatina y la enorme cocina.

Castelo dos Mouros

Construido en la Sierra de Sintra en el siglo IX durante la ocupación árabe, el castillo tenía una posición estratégica para proteger la zona. En 1093 Sintra fue entregada al rey Alfonso VI de León y Castilla, como parte de una alianza estratégica para defenderse de los Almorávides, pero duró poco tiempo, ya que al año siguiente, se apoderaron de Sintra y edificaron los muros del castillo para protegerse.

En 1147 fue recuperado tras la cruzada por la liberación de Lisboa y Sintra. El castillo se fue pasando por generaciones y varios siglos después fue ocupado por los judíos, sin embargo después fueron expulsados del país.

El castillo, que ya había pasado por muchas manos, sufrió dos episodios trágicos, un incendio y un terremoto, fue hasta el siglo XIX que el rey Fernando II, rescató el castillo, como parte de la reconstrucción de la zona.

Estos son sólo algunos de los lugares históricos maravillosos que ofrece la villa de Sintra, entre otras atracciones turísticas se recomienda visitar la Quinta da Regaleira, el Palacio de Monserrate y el Convento dos Capuchos.

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