Alemania

Guía para el Oktoberfest: la fiesta de la cerveza más famosa del mundo

septiembre 27, 2016

Qué hermosa experiencia la del Oktoberfest. En verdad no imaginaba que fuera una fiesta tan bonita, tan alegre y tradicional. En mi opinión, algo que debes vivir al menos una vez en tu vida. Y precisamente como es una celebración muy grande, te quiero compartir algunos consejos por si algún día decides ir a la fiesta de la cerveza más famosa del mundo.

Antes de beber…un poco de historia
Todo empezó en 1810, con la celebración de la boda del príncipe Ludwig (futuro rey de Baviera) y la princesa Teresa Sajonia-Hildburghausen, cuando se organizó una carrera de caballos como honor a los novios. La fiesta se siguió organizando y evolucionando año tras año hasta convertirse en lo que es ahora.

Y aunque te suene extraño, Oktoberfest inicia desde la tercera semana de septiembre y finaliza los primeros días de octubre. La fecha cambia cada año. Y la ciudad recibe millones de turistas, así que lo más recomendable es planear tu viaje con mucho tiempo de antelación.

El vestuario
Es muy bonito ver a todos vestidos con los trajes típicos. Las mujeres con el dirndl y los hombres van con el traje de piel y calcetas largas. Hoy en día es algo tan popular, que puedes ver no solo a los locales, también a los turistas vistiendo estos trajes. Nosotros no nos quedamos atrás y también nos vestimos para la fiesta.

En el caso de las mujeres, el moño del delantal se ata según el estado civil; las solteras lo amarran a la izquierda y las casadas a la derecha. Yo en un principio me olvidé y lo amarré hacia atrás, pero creo que en mi caso fue un obvio error de turista. Si ya vas a viajar hasta Múnich para unirte a esta celebración, que no te de vergüenza vestir el traje típico.

Vistiendo el dirndl, aunque me salí un poco de lo tradicional porque usé zapatillas para andar más cómoda. Foto © Patrick Mreyen
Vistiendo el dirndl, aunque me salí un poco de lo tradicional porque usé zapatillas para andar más cómoda. Foto © Patrick Mreyen


¿Qué carpa elegir?
Lo más famoso del Oktoberfest son las carpas de las cervecerías. Hay que elegir muy bien en dónde quieres tomar y si vas con grupo de más de 6 personas, tienes que ser aún más selectivo porque hay que hacer reservación.

A nosotros nos aconsejó muy bien una chica de Múnich sobre cuáles elegir. Obviamente te recomiendo entrar a conocer todas para ver el ambiente y tomar fotos, pero hay que tener en cuenta que los tarros de cerveza son de un litro, así que es muy difícil que vayas a beber una cerveza en cada carpa, al menos para mí son demasiadas.

Precisamente esos tips que nos pasaron a nosotros son los que quiero compartirte. La descripción de cada una es basado en lo que nos recomendaron los locales y lo que vimos. Voy a empezar por las que más me gustaron.

Hacker
Esta carpa fue mi favorita. Nos la recomendaron mucho porque es la que pone “el cielo de Munich” y a la que acuden más locales. Me encantó el ambiente, la decoración y la música que era más tradicional alemana. ¡No te la puedes perder!

Cervecería: Hacker-Pschorr

La carpa de Hacker es imperdible, sin duda la más impresionante de todas. Foto © Silvia Lucero
La carpa de Hacker es imperdible, sin duda la más impresionante de todas. Por suerte me colé a donde estaban los medios para tomar esta foto y desde arriba se veía aún más impresionante. Foto © Silvia Lucero

Marstall
Una carpa preciosa, yo creo que por fuera era la más bonita. Nuestra experta local nos dijo que era conocida como la más ‘posh’, no me lo pareció cuando entramos, de hecho el ambiente estaba un poco aburrido, pero me gustó que había más gente local que turistas y también se me hizo muy tradicional. La decoración hace alusión a la escuela real de caballería.

Cervecería: Spaten-Franziskaner-Bräu

La carpa de Marstall era preciosa. Foto © Patrick Mreyen
La carpa de Marstall era preciosa. Foto © Patrick Mreyen
Interior de la carpa Marstall. Foto © Patrick Mreyen
Interior de la carpa Marstall. Foto © Patrick Mreyen


Schützen
Esta fue una de las últimas a las que entramos, por fuera no es tan espectacular, pero nos dijeron que era conocida por atraer a los jóvenes de Múnich. Sí había un ambiente más juvenil, más de club, pero tampoco estaba limitada solo a veinteañeros, había de todas las edades. En lo personal ésta carpa me pareció más ‘posh’ que Marstall, después leí que en efecto, aquí se reúne la alta sociedad local y lo puedes ver de inmediato. Es muy divertida, pero se llena demasiado, creo que es mejor ir en grupo y hacer reservación.

Cervecería: Löwenbräu

Carpa Schützen, la más 'posh' y con más ambiente. Foto © Silvia Lucero
Carpa Schützen, la más ‘posh’ y con más ambiente. Foto © Silvia Lucero


Löwenbräu Festival Hall
Tradicional, muy turística, pero muy bonita, sobre todo en su interior que está iluminado con ¡16,500 luces LED! Lo que no me gustó era que el grupo tocaba en su mayoría música americana, no es que no me guste, al contrario, pero en mi opinión si estás en el Oktoberfest en Múnich, quieres la experiencia totalmente tradicional y no estar escuchando ‘Sweet Caroline’ en cada carpa.

Cervecería: Löwenbräu

Bebiendo en el Löwenbräu. Foto © Silvia Lucero
Bebiendo en el Löwenbräu. Foto © Silvia Lucero
Carpa Löwenbrau. Foto © Patrick Mreyen
Carpa Löwenbrau. Foto © Patrick Mreyen


Pschorr-Bräurosl
Muy tradicional, ya que la carpa es manejada por la tercera generación de la familia Heide, según leí en la guía ‘Oktoberfest-Know How’ de la escritora Lydia Morawietz (por cierto, te recomiendo conseguir esa guía a tu llegada a Munich). Ahí puedes escuchar el canto a la tirolesa ‘yodel’.

Cervecería: Hacker-Pschorr

Pschorr-Bräurosl, donde se canta la tirolesa o 'yodel'. Foto © Silvia Lucero
Pschorr-Bräurosl, donde se canta la tirolesa o ‘yodel’. Foto © Silvia Lucero


Schottenhamel
A esta carpa entramos solo a tomar fotos porque es la más antigua del Oktoberfest. Aquí es donde el alcalde de Múnich inaugura de manera oficial cada año esta gran fiesta. A las 12, el alcalde rompe el primer barril de cerveza bajo el tradicional  O’zapft is, evento que se realiza desde 1950.

Cervecería: Spaten-Franziskaner-Bräu

La carpa más antigua del Oktoberfest, donde se realiza la inauguración oficial. Foto © Silvia Lucero
La carpa más antigua del Oktoberfest, donde se realiza la inauguración oficial. Foto © Silvia Lucero
Interior de carpa Schottenhamel. Foto © Silvia Lucero
Interior de carpa Schottenhamel. Foto © Silvia Lucero


Armbrustschützen
Nos advirtieron que ésta también era de las más turísticas, es la de la cerveza Paulaner, pero también de las más tradicionales. Bebimos ahí uno de nuestros tarros y comimos un delicioso Käsespätzle (una especie de pasta con queso y tocino). Al igual que la carpa anterior, no me gustó que era demasiada música americana. Aunque no voy a mentir, después del segundo tarro de cerveza, igual terminamos bailando New York, New York en la mesa.

Cervecería: Paulaner

El Käsespätzle estaba delicioso. Foto © Silvia Lucero
El Käsespätzle estaba delicioso. Foto © Silvia Lucero
Les dije, terminé bailando New York, New York y grabando la evidencia. Foto © Patrick Mreyen
Les dije, terminé bailando New York, New York y grabando la evidencia. Foto © Patrick Mreyen


Augustiner
Mi suegro fue el que hizo más énfasis en que visitáramos esta carpa porque le gusta mucho la cerveza de ahí y sí es deliciosa. Muy tradicional y popular para las familias, ya que los martes tiene el ‘Día de los Niños’.

Cervecería: Augustiner Bräu Wagner KG

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Hofbräu
Obviamente la favorita de los turistas. Nosotros decidimos que no tomaríamos ahí porque la noche anterior habíamos cenado en el restaurante precioso histórico que tienen en el centro de Munich. Te recomendaría hacer lo mismo.

Cervecería: Hofbräu München

Hofbrau. Foto © Silvia Lucero
Hofbräu, de las más populares entre los turistas. Foto © Silvia Lucero


¿Y si no te gusta la cerveza?
También hay una carpa de vino a la cual no entramos, pero me pareció excelente para aquellos que de plano no toleran la cerveza.

Carpa dedicada a los amantes del vino. Foto © Patrick Mreyen
Carpa dedicada a los amantes del vino. Foto © Patrick Mreyen


Y si vas con niños…
El Oktoberfest es una feria, hay juegos súper divertidos para niños. Obviamente las carpas no son para ellos, excepto la de Augustiner que el martes tiene el Día de Niños, pero en la feria se van a divertir en grande.

Los juegos son súper divertidos. Foto © Silvia Lucero
Los juegos son súper divertidos. Foto © Silvia Lucero


¿Cómo sobrevivir a tanta cerveza?
Como te mencionaba anteriormente, los vasos son de un litro, así que lo mejor es pedir comida con cada tarro. La cerveza me pareció ligera, pero cada quien tiene diferente capacidad de aguantar. Como podrás imaginarte te toca ver hasta aquellos que salen caminando de milagro.

Comer, comer y comer es lo mejor que puedes hacer si vas a beber varios tarros de cerveza. Foto © Patrick Mreyen
Comer, comer y comer es lo mejor que puedes hacer si vas a beber varios tarros de cerveza. Foto © Patrick Mreyen

Vas a ver muchos puestos de comida afuera, sobre todo de pollo rostizado –algo muy tradicional-, de pescado, pretzels y las famosas galletas de corazón.

Las tradicionales galletas de corazón. Foto © Silvia Lucero
Las tradicionales galletas de corazón. Foto © Silvia Lucero

Que no te asuste ver a las multitudes y tener que ordenar de comer y beber dentro de las carpas, están súper bien organizados y el servicio es sorprendentemente rápido. Así que aprovecha para probar las especialidades locales.

Una de las carpas de comida más famosa. Foto © Silvia Lucero
Una de las carpas de comida más famosa. Foto © Silvia Lucero


¿Efectivo o tarjeta?
Ningún lugar acepta tarjeta de crédito, así que ve preparado con suficiente efectivo. ¿Cómo saber cuánto dinero llevar? La cerveza cuesta 10.60 euros, pero para que te des una idea nosotros gastamos en total alrededor de 100 euros y bebimos 6 cervezas, comimos pretzels, Käsespätzle y unos sándwiches de pescado.

Y seguramente te preguntarás ¿por qué comienza en septiembre si se llama Oktoberfest? Por algo muy simple, el clima. Si bien antes se realizaba en octubre, terminaron pasándola a la tercera semana de septiembre para aprovechar días un poco más calientes. Y aún así, nos tocó un poco frío.

Si crees que el Oktoberfest es solo para ir en grupo, que eso no te detenga de viajar, porque puede que sí sea más divertido ir con los amigos, pero nosotros éramos solo dos y la pasamos increíble. Lo que cuenta es la experiencia y la actitud con la que estés dispuesto a celebrar la fiesta más grande de la cerveza.

Ah y sobre todo no te olvides de levantar tu tarro de cerveza y cantar la típica canción “Ein Prosit der Gemütlichkeit”. ¡Prost!


¿Quieres ir al Oktoberfest? Escríbeme a silvia.lucero@tripdreaming.com